Aranxa Sánchez, subdirectora de financiamiento sostenible de la Secretaría de Hacienda y cofundadora del colectivo Menstruación Digna México, indicó que esta iniciativa es el primer paso para tener una política tributaria con enfoque de género.
El hecho de gravar en cero los alimentos para animales prevé darle un tratamiento similar al de productos de alimentación humana, mientras que el cambio en los menstruales busca apoyar a mujeres en situación de pobreza.
De acuerdo con la Miscelánea Fiscal que entregará la Secretaría de Hacienda al Congreso de la Unión, la propuesta es parte de una estrategia para garantizar una menstruación digna a las mexicanas.
