El Secretario de Estado y el Sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado informaron al Pontífice sobre algunas situaciones en la Iglesia y en el mundo.
El Papa Francisco ha permanecido sin fiebre en las últimas horas. El intercambio gaseoso ha mejorado; los exámenes hematoquímicos y hemocitocritométricos son estables.
El Papa Francisco ha insistido constantemente que acciones como el ayuno no sirven de nada si no se acompañan de sacrificios reales y acciones por los demás.