Las autoridades locales realizan operativos de vigilancia para corroborar que el ruido en las colonias no rebase los 65 decibeles, como lo marca la ley durante la noche.
Además, se está trabajando con los países vecinos para abordar las causas fundamentales de la migración, como la pobreza y la violencia, y está trabajando para proporcionar vías legales y seguras para la migración.
Los organizadores estarán obligados a adoptar las medidas necesarias para garantizar el buen estado de conservación y correcto funcionamiento del sistema de vigilancia.